Para los casos de oportunidades de deuda, el desarrollador adquiere una obligación de pago, que en caso de incumplir se inicia un proceso específico para recuperar la inversión e intereses. En los casos de copropiedad no existe como tal una obligación de pago, lo que existe son proyecciones y expectativas que se pueden cumplir o no.

La mayoría de los préstamos son respaldados por un inmueble con un valor mínimo igual a la cantidad prestada (normalmente el doble). Esto lo puedes conocer en los indicadores principales, en el análisis de cada oportunidad (1) y para más detalles sobre el respaldo de cada proyecto, encontrarás la sección de garantía (2) como lo mostramos a continuación:

En caso de que el desarrollador no pague, o se identifique que no tendrá la capacidad para realizar el pago a tiempo, se inicia un proceso para conseguir el pago a tiempo, o de ser necesario, ejecutar la garantía. Puedes conocer ese proceso de recuperación de pagos a detalle aquí. 

Es importante tener claro que en caso de que un desarrollador incurra en incumplimiento de pago, además del proceso mencionado en el párrafo anterior, se aplicaría una multa en forma de intereses moratorios, además de verse afectado en su reputación, así como en su historial crediticio pues se reportará en buró de crédito.